Una vez, hace mucho tiempo, un A.·. M.·. inquirió a su Maestro sobre la clave para llegar a ser un verdadero Masón. El Maestro, un Masón de larga trayectoria y experiencia, a quién todos acudían por sus sabios consejos, le dijo:
- Q.·. A.·. para llegar a ser un verdadero Masón la clave está en la triple "C"
Hace algunos meses, en un foro de Masonería, alguien tuvo a bien hacer la pregunta acerca de cómo reconocer a un Hermano Masón en la calle. Simpáticamente, uno de los foristas respondió: “A menos que ande despistado y no se haya quitado el mandil…”. En efecto, por regla general, no se reconoce a un masón (si sabe este ser discreto), pues debe comportarse como una persona
Esta verdad concerniente a la Búsqueda de la Divina Luz ha sido expresada en los términos de una conocida alegoría, que reza así: Hubo un tiempo en la historia de la raza humana en que los dioses robaron por celos al hombre su Divinidad y, reunidos en alto cónclave, buscaron decidir dónde ocultar lo que habían robado.
© Copyright 2023 R.L.S. Afortunada 39 by Guiseppina